Por: Patricia Maradei.
Todos conocemos a
personas que se quejan de cuánto daño y ataque han recibido de
otros.
Ellas son las más sufridas, abandonadas, se muestran ofendidas y se proponen salirse con la suya mediante el chantaje emocional y físico a quienes les rodean, sean padres, hermanos, parejas, amigos.
Son personas que exigen permanentemente atención de los demás, la misma atención que ellas son incapaces de otorgarse a sí mismas.
Ellas son las más sufridas, abandonadas, se muestran ofendidas y se proponen salirse con la suya mediante el chantaje emocional y físico a quienes les rodean, sean padres, hermanos, parejas, amigos.
Son personas que exigen permanentemente atención de los demás, la misma atención que ellas son incapaces de otorgarse a sí mismas.